Liberbank, presidido por Manuel Menéndez, ha advertido de que la exigencia a la banca española de mayores provisiones para los créditos refinanciados podría llegar a tener un impacto negativo sobre los resultados de las entidades.

Y todo ello en un momento en el que la banca española sigue enfrentándose a un importante problema de morosidad, los activos rentables disminuyen y aumentan los saneamientos, ha explicado el también consejero delegado de Liberbank en la junta de accionistas.

Menéndez ha admitido la complejidad para las entidades que como Liberbank , formado por CajasturCCMCaja Cantabria y Caja Extremadura, tienen presencia exclusivamente en España, país que atraviesa una «profunda y generalizada crisis» y que ha aprobado continuos cambios regulatorios que afectan a la banca.

De hecho, esos cambios son los que explican en gran medida que Liberbank haya perdido más de 1.735 millones de euros en 2012 después de provisionar todo su riesgo inmobiliario y contabilizar el impacto del traspaso de activos tóxicos al «banco malo», Sareb.

Unas cuentas que deberán aprobar hoy los accionistas y que, unido al plan de recapitalización de la entidad tras el déficit de 1.198 millones detectados en las pruebas de estrés, marcan «un punto de inflexión», en palabras de Menéndez.

A partir de ahí, el presidente de la entidad prevé que se inicie un periodo de consolidación y progresiva recuperación de la eficiencia y de la rentabilidad, si bien avisa del impacto negativo que pueden tener las nuevas exigencias de provisiones por los créditos refinanciados.

Estas provisiones ha hecho que muchas entidades estén intentando obtener plusvalías con la venta de participaciones o negocios que no consideran clave, pero previsiblemente lastrará los resultados del sector, según el consenso de los analistas.

En este contexto y teniendo en cuenta la situación económica de España, el primer ejecutivo de Liberbank ha elogiado que se siga avanzando en la consolidación fiscal aun con el riesgo de debilitar el crecimiento de la economía a corto plazo.

Por ello ha pedido seguir avanzando en las reformas necesarias para flexibilizar la economía, eliminar barreras de acceso a determinadas actividades profesionales, impulsar la actividad emprendedora y favorecer la internacionalización de las empresas.

La intervención de Menéndez ante los accionistas es la primera desde que la entidad debutó en bolsa el pasado 16 de mayo, sin tener que recurrir a una oferta pública de venta o suscripción de acciones, OPV u OPS, como suele ser habitual.

La entidad salió al mercado poniendo en cotización en las bolsas de Madrid, Barcelona, Valencia y Bilbao acciones fruto del canje de híbridos, como participaciones preferentes o deuda subordinada, en manos de grandes inversores y clientes minoristas.

Una operación muy criticada por asociaciones de consumidores como Adicae, que ha movilizado a «pequeños accionistas forzosos» de Liberbank para que se acudan desde Cantabria, Extremadura y Asturias a la junta que se celebra en Madrid y aprovechen para «denunciar el engaño del que han sido víctimas».

Por otro lado, en la misma semana en la que CCOO UGT alcanzaron un acuerdo laboral con la dirección de Liberbank , el sindicato Csica denuncia que hoy se liberó de su trabajo a «numerosos» directivos para que «arropen» al presidente de la entidad en la junta.

Este hecho, siempre según este sindicato, ha hecho que algunos accionistas se vean relegados a sentarse en un segundo salón desde donde sus reclamaciones no tendrán el mismo impacto que si se hiciesen frente a la presidencia de la junta general.

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