El Ayuntamiento de Marina de Cudeyo y la empresa Ecoturismo han puesto en marcha un proyecto para recuperar el águila pescadora en la Bahía de Santander.

Esta rapaz, con presencia en determinadas regiones de Europa y Norteamérica, se extinguió en la Península Ibérica a principios de los ochenta. Sin embargo, en los últimos años, y gracias a programas de reintroducción, varias parejas se han reproducido con éxito en las provincias de Cádiz y Huelva.

Por su parte, la Bahía de Santander es una de las zonas del Norte de España donde, desde el 2001, se registran ejemplares en invierno y los periodos migratorios, que recalan en este estuario.

Este hecho, unido al alto éxito pesquero observado, han llevado a considerar idóneo este espacio para poner en marcha el proyecto orientado a la recuperación del águila pescadora.

La Bahía ha sido seleccionada por razones técnicas y biológicas, ya que cuenta con la figura de protección Zona Especial de Conservación (ZEC) Dunas del Puntal y el estuario del Miera, incluido en la Red Natura 2000.

Es decir, que dispone de medidas específicas de conservación del hábitat, a lo que se suma una «alta» disponibilidad de presas así como también un «elevado» éxito pesquero.

La primera medida para la recuperación de la especie se desarrolló el pasado sábado, 28 de mayo, cuando diez voluntarios instalaron un nido artificial de siete metros de altura y un posadero de ocho metros en la Marisma del Conde, en las localidades de Rubayo, Elechas y Pedreña, en Marina de Cudeyo.

El proyecto cuenta con el apoyo y asesoramiento de organizaciones y entidades, que han citado en este sentido a Roy Dennis, presidente de la Highland Foundation for Wildlife, y el doctor Aitor Galarza, director del proyecto de recuperación de la especie en Urdaibai.

Precisamente, debido a la traslocación de individuos jóvenes desde esta última reserva de Vizcaya y desde Escocia, se vienen observando desde 2013, tanto en esta zona vasca como en la bahía santanderina ejemplares adultos en periodo reproductor.

Este hecho anima y refuerza la idea de ir consolidando la especie en la Cornisa Cantábrica. Precisamente, esta primavera uno de esos ejemplares, de cuatro años de edad, se ha afincado en el estuario de la capital cántabra. Se trata de un macho que pasó sus dos primeros años de vida en África.

Y apenas dos horas después de instalar el citado nido en la Marisma del Conde, este macho se posó sobre él, lo que alienta a los responsables del proyecto, que esperan que en los próximos años forme una pareja y saque adelante una nueva generación de águilas pescadoras en el Norte de España, casi 40 años después de la extinción de la especie.

El proyecto se enmarca dentro del Plan de Ecoturismo de Marina de Cudeyo, que se viene desarrollando desde principios de año en el municipio, y que incluye rutas interpretativas a pie y en barco, charlas, cursos de fotografía, actividades de educación ambiental con escolares y la celebración de las II Jornadas de Ecoturismo, el próximo mes de septiembre.

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