La Puebla Vieja de Laredo ya cuenta con un grupo de trabajo para mejorar su accesibilidad

Una decena de asociaciones, colegios profesionales y grupos políticos municipales han acordado el pasado viernes la constitución de un grupo de trabajo para mejorar la accesibilidad de la Puebla Vieja de Laredo. La decisión se ha adoptado durante la reunión convocada por el alcalde, Ángel Vega, en el Ayuntamiento, para buscar el máximo consenso ciudadano en torno al futuro proyecto que mejorará los accesos peatonales al casco histórico laredano.

Al encuentro han asistido representantes de la Asociación de Amigos del Patrimonio, la Asociación de Vecinos de la Puebla Vieja, la Asociación de Voluntarios de la Puebla Vieja, la Asociación de Empresarios ACELAR, la plataforma ‘Accesibilidad Sí, pero No Así’, el Colegio de Arquitectos de Cantabria, el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Cantabria, así como portavoces y representantes del PSOE, PRC e IU. Junto al alcalde han comparecido el primer teniente de alcalde, Ramón Arenas, y el concejal de Educación y Cultura, Alejandro Liz.

Según ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa, Vega ha subrayado la plena coincidencia de todos los participantes en el objetivo irrenunciable de hacer más accesible la Puebla Vieja. Tras reiterar que el único motivo para dejar a un lado el proyecto ha sido atender favorablemente la petición así trasladada mediante una recogida de firmas, ha insistido en que se abre una nueva etapa en la que se podrán estudiar diferentes alternativas «para conseguir la accesibilidad de forma real y realizable en un corto plazo».

El grupo de trabajo recién constituido contemplará la incorporación de otras entidades como CERMI Cantabria, que aglutina a las entidades más representativas de personas con discapacidad en nuestra región.

De acuerdo a lo abordado durante la reunión, el grupo de trabajo partirá de cero a la hora de trazar las futuras líneas de actuación. Ello incluye, si así lo estiman sus integrantes, la convocatoria de un concurso de ideas para seleccionar aquella alternativa que resulte «más idónea».

Algunos de los participantes han abogado por plantear el desarrollo de un Plan Director que ayude a diagnosticar las posibles alternativas y que las contemple no sólo desde una perspectiva técnica, sino también desde el punto de vista del valor patrimonial afectado, y otras consideraciones ambientales.

En este contexto, los colegios profesionales han planteado la conveniencia de conocer a fondo el actual proyecto para estimar si tiene algún aspecto que pueda ser recuperable, como en el caso de todo lo relativo a las mediciones sobre el terreno así como a los diagnósticos sobre la accesibilidad.

El nuevo grupo deberá afinar las bases que regulen la futura selección de proyectos, sea mediante un concurso público de ideas o mediante otra fórmula que se determine en el seno de dicho grupo. Sus miembros serán, además, los encargados de componer el jurado que acabe resolviendo entre las propuestas que finalmente se presenten para solucionar el problema de la accesibilidad a la Puebla Vieja.